Hace algunas semanas la marca de lujo Chanel se retiró de Rusia como parte de las sanciones comerciales contra el presidente Vladimir Putin tras el conflicto con Ucrania, cerrando las puertas de sus tiendas en dicho país; no obstante, la firma francesa ha tomado nuevas medidas sobre la venta de sus productos hacia los rusos.
Chanel anunció que dejará de vender sus perfumes, ropa y otros artículos a clientes rusos en el extranjero si su intención es llevarlos a su país, mencionando que las leyes más recientes de sanciones de la UE y Suiza incluyen la prohibición a la venta, suministro y la transferencia o exportación directa o indirecta de artículos de lujo a cualquier persona natural o legal de entidad u organismo en Rusia o para su uso en Rusia, es decir, solo los rusos que residan en el extranjero podrán comprar productos Chanel.
“Hemos lanzado un proceso para pedirles a los clientes cuyas principales residencias no conocemos, que confirmen que los artículos que compran no serán usados en Rusia”, dijo Chanel.
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Algunas figuras rusas como la presentadora de noticias Marina Ermoshkina y la DJ Katya Guseva reaccionaron con molestia subiendo a sus redes videos en donde se les aprecia destruyendo bolsos Chanel de miles de euros.
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Por su parte, la influencer Victoria Bonya no dudó en unirse a esta forma de protestar cortando por la mitad un bolso de mano clásico de la firma francesa ante sus nuevas reglas, cuestionando: “Si Chanel no respeta a sus clientes, ¿por qué nosotros tenemos que respetarlos a ellos?”.
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