Recorrer la Cueva de los Verdes es verdaderamente viajar a las entrañas de la tierra, se trata de un recorrido único y espectacular.
Hace más de 5000 años se produjo la erupción del volcán de La Corona, en Lanzarote. El tubo volcánico que se formó va desde el volcán hasta el mar. El tramo submarino es de un kilómetro y medio y se le conoce como el Túnel de la Atlántida.
La cueva de los Verdes forma parte de este tubo. Los habitantes de la isla se refugiaban aquí para protegerse de los ataques de los corsarios.
Los famosos Jameos del agua forman parte también de este tubo donde hay rincones que son realmente mágicos.
La cueva fue utilizada como refugio ante los ataques que asolaban la isla, recibe su nombre de los propietarios de las tierras, la familia Verdes.
La gama de colores en las paredes y bóvedas es impresionante. Los colores rojos de deben a la oxidación del contenido de hierro, en tanto que los ocres provienen de los reflejos de luz en las acumulaciones salinas causadas por las filtraciones de agua.
