Cada vez son más los famosos que, obsesionados por lucir más bellos y jóvenes, acuden al bótox y a las cirugías. No es que hayan quedado desastrosos, pero te presentamos algunas personalidades que decidieron mejorar y esto último queda en tela de duda.
Cualquier operación estética tiene su riesgo. Salir del quirófano y no reconocernos delante del espejo es algo mucho más común de lo que imaginamos y el número de cirugías por arrepentimiento es elevado.
Renée Zellweger
La actriz conocida por la popular actuación en la película “El Diario de Bridget Jones” ha dejado a muchos con la boca abierta. La razón: su más reciente apariencia durante una entrega de premios organizada por una revista internacional. Aunque muchos ya estaban acostumbrados a ver los cambios de aspecto a los que se somete por la exigencia de su trabajo, en esta ocasión lució tan diferente que muy pocos la reconocieron. Y aunque la misma Renée, de 45 años, asegura no haberse sometido a ninguna operación estética, podría estarnos mintiendo.
Bruce Jenner
No ha sido una solamente, ya se han juntado a la lista varios los procesos por los que ha pasado la cara del exatleta olímpico y ex padrastro de Kim Kardashian. Su primera cirugía fue en 1984, cuando se realizó un lifting facial y una rinoplastia. No obstante, como no quedó del todo satisfecho, volvió a tener un lifting en el 2009.
Meg Ryan
La rubia de “Cuando Harry conoció a Sally” siempre fue una mujer bella. Rasgos delicados, ojos celestes y linda sonrisa lograron ganarse la simpatía del público para convertirse en una de las «novias» preferidas de Hollywood.
Donatella Versace
La popular actriz que en los 90 encarnó a la maniática Mónica Geller en Friends, Courteney Cox. La estadounidense ha decidido declararle la guerra abierta al botox, después de haberlo usado en diferentes ocasiones.
«Hacerse mayor no es algo fácil de asimilar. Pero he aprendido la lección. El problema fue que yo estaba tratando de ganarle la partida al envejecimiento», declaraba la mítica actriz en un programa de televisión. “Hice cosas que lamento y, por suerte, son cosas que se disuelven y desaparecen. Eso es bueno”, dijo.
